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II. Congreso lifeteen en Barcelona: método fecundo para catequesis de adolescentes

Del 1 al 3 de marzo se celebra en la abadía de Montserrat el Encuentro Europeo de LifeTeen (www.lifeteen.es), el cada vez más popular método de evangelización y catequesis para adolescentes que se está extendiendo por las parroquias españolas.

Acuden 280 asistentes, todos ellos catequistas de jóvenes o líderes en pastoral juvenil y adolescente. Cuarenta asistentes son sacerdotes.

Es la segunda vez que se celebra el encuentro europeo de Lifeteen en Montserrat, y como el año pasado también han llegado delegados (es decir, sacerdotes, jóvenes y catequistas) de Holanda, Reino Unido, Portugal, Austria, Alemania e Italia. Hay una ponente llegada de Nueva Zelanda y dirigentes de LifeTeen de Estados Unidos, donde nació el método en los años 80 y donde mantiene su central.

Hace un año LifeTeen estaba presente en 85 parroquias españolas, y el año anterior en 60; en 2011 llegó a España a partir de la parroquia del Santo Espíritu de Tarrasa (que es la catedral). Ahora, en marzo de 2019, está presente en 118 parroquias. O, dicho de otra forma: de 1 a 118 parroquias en 8 años, y ha doblado respecto a hace 24 meses. A nivel mundial, se aplica en más de 1.800 parroquias, sobre todo en EEUU.

¿Qué significa eso? Que las parroquias ven que la catequesis de adolescentes de toda la vida no funciona, que los jóvenes dejan las parrroquias a los 12, o 14 años, y que hay que hacer algo para llegar a ellos y formarlos. Y LifeTeen lo consigue.

Randy Raus, presidente de LifeTeen, acude cada año a Barcelona desde Atlanta, asombrado de ver cómo crece el método en el país, mientras que en Escocia, Holanda o Irlanda su crecimiento es muchísimo más lento. En buena parte tiene que ver con razones culturales y demográficas: en España aún hay familias que acercan a sus chavales de 12 o 13 años a la parroquia para hacer la confirmación. En otros países ya no se hace, o es un rito que se realiza en colegios o congregaciones religiosas que no desarrollan un sistema parroquial. Pero LifeTeen no se hace «para la confirmación» (aunque alguna vez se use como gancho) sino para crear un ambiente adolescente alternativo, alegre, de amistad y fe, con centralidad de la adoración eucarística, la formación, la música de alabanza y adoración y el acompañamiento cercano de los catequistas.

«Antes las personas se daban cuenta de que se sentían vacías a los treinta años… hoy ya lo sienten a los 13 o 14 años, y ahí los cristianos tenemos algo hermoso para ofrecer», dijo el director de LifeTeen, un padre de 9 hijos que estuvo alejado de Dios varios años en su juventud.

Randy Raus ha explicado al empezar estas jornadas un ejemplo que vio en Haití y le impresionó. «Íbamos en una furgoneta a una parroquia rural, por un camino de polvo y montaña, y en medio de ningún sitio vimos una adulta joven con seis chicas adolescentes… ¡y camisetas de Lifeteen! Efectivamente, ellas iban al mismo sitio que nosotros. Las subimos a la furgoneta… pero tardamos aún bastante en llegar. ¡Esa catequista caminaba 10 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta para acompañar a sus seis chicas cada semana a Lifeteen! A eso yo lo llamo «acompañar», estar con los adolescentes», señala Raus.

  • ¿Qué se necesita para empezar LifeTeen en una parroquia?

«Para empezar LifeTeen se necesita un equipo de al menos 3 catequistas que tengan vida espiritual y sacramental«, responde Massegú. «Después, hay que adquirir los materiales, que están disponibles en LifeTeen.es. Hay que planificarse, entender como funcionan las sesiones, rezarlo mucho y lanzarse. Siempre habrá un poco de vértigo, pero hay que lanzarse», explica Massegú.

Steve Allgeyer, uno de los directivos norteamericanos de LifeTeen en el encuentro, padre de 8 hijos, inició la primera jornada insistiendo en el amor de Dios como Padre constante, que nunca abandona, que siempre ama, acoge, invita, espera… El papel del catequista es ser un canal para ese amor, no ponerle dificultades, beber de ese amor en la oración y eucaristía y acompañar muy de cerca a los adolescentes como un hermano mayor.

  • Acompañarlos, escucharlos… y convertirlos en discípulos

Raus insistió en que «acompañar es el núcleo de Lifeteen», y algo que el mundo no ofrece al muchacho pero la Iglesia sí debe hacerlo. Acompañar, detalló, incluye 3 cosas:

escuchar: «no hay casi sitios donde un joven se sienta escuchado, y en Lifeteen los escuchamos, y aprendemos sus fuerzas, sus debilidades, y les dejamos hablar»

mentorear: en mentor (cualquier monitor/catequista de LifeTeen) les anima a los chicos a reflexionar sobre sus errores y a aprender de ellos; el mentor les ayuda a pensar

enfocar hacia Dios: en Lifeteen se habla de relaciones, adicciones, sexo, trato familiar, virtud en el estudio, etc… pero todo se orienta a Dios, a la cercanía de Dios en la eucaristía…

Además, Raus pidió convertir a los adolescentes en discípulos: es decir, en personas a los pies del Maestro Jesús, que comparten la visión que Él transmite y que se apuntan a la misión que Él encarga. Para ello, hay que acompañarlos y equiparlos. El discípulo no es un consumidor de sacramentos, sino alguien que tiene un trato personal con Cristo.

  • Poder de lo alto y valentía para hablar claro

Los chicos cristianos de hoy van a ser contraculturales y han de poder recibir un Evangelio completo y valiente, también en temas espinosos socialmente como «cuando hablamos de sexo, de aborto, de atracción por el mismo sexo… todo eso se ha de explicar con coraje, invitando a todos a la santidad, con claridad, y a los chicos les encanta si se les habla claro y con valentía, ven que la Iglesia tiene un mensaje relevante y a la vez auténtico y compasivo», exhortó Randy Raus.

 

Para amar así a los jóvenes y transformar así la Iglesia y la sociedad formando discípulos llenos de Espíritu Santo, se necesita ese «poder de lo alto» que hay que invocar y pedir sin cesar. El catequista lo hará convencido de su misión: «venid y os haré pescadores de hombres«, sigue diciendo Cristo.

Más información en LifeTeen.es
Para conocer el campamento de verano cerca de Madrid de LifeTeen de 8-13 de julio: lifeteen.es/summer-camp

Fuente: Religiónenlibertad.com

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